El pH del agua es un factor crítico en la efectividad de muchos productos fitosanitarios y reguladores de crecimiento. En condiciones alcalinas, ocurre la hidrólisis alcalina, degradando el pesticida a formas inactivas. La degradación de un pesticida puede medirse en términos de su vida media (reducción del contenido de ingrediente activo en un 50%).
Como regla general, los herbicidas, insecticidas y fungicidas funcionan mejor en agua ligeramente ácida, con un pH de 4 a 6.5. El pH de la solución puede influir en cuánto tiempo una molécula de pesticida permanece intacta, su estabilidad y efectividad. Los agentes tamponadores previenen la hidrólisis de pesticidas durante la mezcla en el tanque. Debido a su pH ácido, los productos Eco Gel también pueden usarse como agentes tamponadores para preservar la estabilidad y mejorar la eficacia de los productos fitosanitarios y reguladores de crecimiento en condiciones de agua dura.